Los lectores asiduos de libros y partidas de ajedrez saben de la importancia de los comentarios, que a modo de cortos prefacios, los maestros incluyen antes de la primera jugada al analizar sus juegos. Estos textos suelen dar una idea de la situación y el momento en el que se desarrolló el enfrentamiento, así como de la importancia del acontecimiento para los protagonistas del lance. Incluso puede darse el caso de que estas opiniones se vayan modificando o ampliando a lo largo del tiempo, cuando el jugador incluye de nuevo esa partida en sucesivos libros; descubriéndonos nueva información y nuevos aspectos siempre de interés. Encontramos un claro ejemplo de esto en cuatro libros del GM David Bronstein, separados por el tiempo y las circunstancias, en los que aporta cuatro comentarios distintos, introductorios a su afamada partida Reshevsky vs Bronstein, en la ronda número trece de Zurich 1953. Una defensa India de Rey donde la importancia del resultado se pone claramente de manifiesto.
Primer comentario
Hallamos el primer comentario en la obra "The chess struggle in practice" , editorial Batsford 1980, página 220 y en su equivalente española "El ajedrez de torneo" editorial Fundamentos 1984, página 255, sobre el Torneo de Candidatos de Zurich 1953. En estos dos libros Bronstein nos dice de su enfrentamiento con Reshevsky:
"Este encuentro afectó a la posición de los líderes, toda vez que yo estaba situado a punto y medio de Reshevsky y una victoria por mi parte reduciría la diferencia a medio punto. Pero si Reshevsky ganase, además de mantenerse invicto, alcanzaría a Smyslov. Las tablas no satisfacían a ninguno de los tres."
Bronstein inicia con este párrafo su comentario introductorio para luego pasar a desgranar los aspectos estratégicos y técnicos del juego y las vicisitudes en diversos momentos de la partida. Podemos decir que este primer comentario es bastante aséptico y no revela nada especial que pudiese haber acontecido alrededor de este enfrentamiento.
Segundo comentario
Aparece en la famosa obra "Chess Improviser" redactada en colaboración con Vainstein, editorial Pergamon 1983; donde en la página 42 los autores, bajo el curioso título "Un film para televisión en siete partes", inician un comentario muy historiado, diríamos que novelado del desarrollo de la partida. Se nos hace toda una recreación de los pensamientos que pudieron pasar por las mentes de los contendientes y de las esperanzas que cada uno depositaba en alcanzar un buen resultado.
Aquí encontramos que se hace mucho más hincapié en la importancia del resultado, para los jugadores, que en el comentario anterior. La comparación del juego con un film dividiendo sus partes en prólogo, convergencia, confrontación, combinación endiablada, brillantez, análisis y estudio, tiñe de un tono de irrealidad a la partida y la hace muy atrayente.
Tercer comentario
D. Bronstein y K. Neat incluyen también esta partida en la didáctica monografía "Bronstein y la India de Rey", editorial Hispano Europea 2006, en cuya página 101 podemos leer:
"...Como bien se sabe ahora, los jugadores soviéticos estaban en una dificil posición psicológica. El juego desinhibido estaba fuera de lugar. Cada jugada la examinaban con todo detalle no solamente fervorosos admiradores sino también dirigentes de todo rango. Del resultado de una partida podía depender, por decirlo con suavidad, todo tu bienestar. Y aquí, había recibido una orden ultradificil: ¡Tenía que ganar!"
Aquí el cambio en el tipo de comentario es radical, nada de especulaciones o reflexiones sobre la importancia del resultado del encuentro, la realidad se impone por encima de todo y se nos deja ver que el GM de Kiev había sido presionado de una u otra forma para desequilibrar la balanza a su favor.
Cuarto comentario
Completa el panorama desarrollado en los tres anteriores, y lo encontramos en el libro de Früstemberg y Bronstein "El Aprendiz de Brujo" editorial Paidotribo 2001, donde en el prefacio de la página 142 podemos leer entre otras cosas:
"...La víspera a esta partida los jefes de nuestra delegación me comentaron que, tras evaluar la situación en el torneo, habían llegado a la conclusión de que yo podía ganar a Reshevsky, y me ordenaron hacerlo así. Fui a la partida, me senté ante el tablero y no me volví a mover de nuevo hasta que se aplazó el juego. ...."
Confirma definitivamente lo que ocurrió. Eran tiempos muy difíciles de guerra fría y garantizar el triunfo de un jugador soviético era esencial. Reshevsky estaba por aquella época en plena forma, y a pesar de no disponer de segundo que le ayudara en los análisis, plantó cara a la armada rusa poniendo en peligro el liderato de Smyslov en el torneo.
Lo que verdadermente me inquieta es que si las autoridades soviéticas podían obligar a un GM como D. Bronstein a ganar una partida, para mayor gloria del ajedrez ruso ¿Le podían obligar a perderla?
Hallamos el primer comentario en la obra "The chess struggle in practice" , editorial Batsford 1980, página 220 y en su equivalente española "El ajedrez de torneo" editorial Fundamentos 1984, página 255, sobre el Torneo de Candidatos de Zurich 1953. En estos dos libros Bronstein nos dice de su enfrentamiento con Reshevsky:
"Este encuentro afectó a la posición de los líderes, toda vez que yo estaba situado a punto y medio de Reshevsky y una victoria por mi parte reduciría la diferencia a medio punto. Pero si Reshevsky ganase, además de mantenerse invicto, alcanzaría a Smyslov. Las tablas no satisfacían a ninguno de los tres."
Bronstein inicia con este párrafo su comentario introductorio para luego pasar a desgranar los aspectos estratégicos y técnicos del juego y las vicisitudes en diversos momentos de la partida. Podemos decir que este primer comentario es bastante aséptico y no revela nada especial que pudiese haber acontecido alrededor de este enfrentamiento.
Segundo comentario
Aparece en la famosa obra "Chess Improviser" redactada en colaboración con Vainstein, editorial Pergamon 1983; donde en la página 42 los autores, bajo el curioso título "Un film para televisión en siete partes", inician un comentario muy historiado, diríamos que novelado del desarrollo de la partida. Se nos hace toda una recreación de los pensamientos que pudieron pasar por las mentes de los contendientes y de las esperanzas que cada uno depositaba en alcanzar un buen resultado.
Aquí encontramos que se hace mucho más hincapié en la importancia del resultado, para los jugadores, que en el comentario anterior. La comparación del juego con un film dividiendo sus partes en prólogo, convergencia, confrontación, combinación endiablada, brillantez, análisis y estudio, tiñe de un tono de irrealidad a la partida y la hace muy atrayente.
Tercer comentario
D. Bronstein y K. Neat incluyen también esta partida en la didáctica monografía "Bronstein y la India de Rey", editorial Hispano Europea 2006, en cuya página 101 podemos leer:
"...Como bien se sabe ahora, los jugadores soviéticos estaban en una dificil posición psicológica. El juego desinhibido estaba fuera de lugar. Cada jugada la examinaban con todo detalle no solamente fervorosos admiradores sino también dirigentes de todo rango. Del resultado de una partida podía depender, por decirlo con suavidad, todo tu bienestar. Y aquí, había recibido una orden ultradificil: ¡Tenía que ganar!"
Aquí el cambio en el tipo de comentario es radical, nada de especulaciones o reflexiones sobre la importancia del resultado del encuentro, la realidad se impone por encima de todo y se nos deja ver que el GM de Kiev había sido presionado de una u otra forma para desequilibrar la balanza a su favor.
Cuarto comentario
Completa el panorama desarrollado en los tres anteriores, y lo encontramos en el libro de Früstemberg y Bronstein "El Aprendiz de Brujo" editorial Paidotribo 2001, donde en el prefacio de la página 142 podemos leer entre otras cosas:
"...La víspera a esta partida los jefes de nuestra delegación me comentaron que, tras evaluar la situación en el torneo, habían llegado a la conclusión de que yo podía ganar a Reshevsky, y me ordenaron hacerlo así. Fui a la partida, me senté ante el tablero y no me volví a mover de nuevo hasta que se aplazó el juego. ...."
Confirma definitivamente lo que ocurrió. Eran tiempos muy difíciles de guerra fría y garantizar el triunfo de un jugador soviético era esencial. Reshevsky estaba por aquella época en plena forma, y a pesar de no disponer de segundo que le ayudara en los análisis, plantó cara a la armada rusa poniendo en peligro el liderato de Smyslov en el torneo.
Lo que verdadermente me inquieta es que si las autoridades soviéticas podían obligar a un GM como D. Bronstein a ganar una partida, para mayor gloria del ajedrez ruso ¿Le podían obligar a perderla?
2 comentarios:
Buen artículo!
Gracias, procuraremos mejorar.
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